El vecino.:
Erase una vez un niño que se construyó un búnker, este niño tenía muy poca edad.
La característica principal de búnker es que por cada lado era de una forma u otra y ninguna de ellas se asemejaba lo mas mínimo a la forma interior del dicho búnker. Cada una de esas formas exteriores no asombraban y tenían la función de evadir a la intriga, que tendrían por saber lo que hay dentro,de los individuos del exterior.
Este niño solo dejaba entrar a muy poca gente e incluso cuando les dejaba a veces se arrepentía.
Al parecer el niño vivía triste y amargado pero, por lo contrario, el niño vivía muy feliz en el búnker que el mismo construyó.
Vivía en paz y alejado de las demás personas que el no quería que entrasen.
La historia aún no ha acabado pero el niño, a no ser que sea estrictamente necesario jamás, bajo ningún concepto, dejará entrar a alguien.
Relato de la vida de un vecino.
Gonzalo I.
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